DE BORREGOS Y APROVECHADOS...

En periodo electoral es cuando uno se da cuenta de lo borrego/a que puede llegar a ser la gente. La campaña de elecciones que son un par de semanas pero que comienza extraoficialmente con tres meses de antelación es la época en la que se demuestra ser más tonto de lo que creíamos. Los políticos se acercan a dar una vuelta por las barriadas (con su cuadrilla de lameculos, por supuesto) prometen mejoras de sus calles, centros culturales para que los críos tengan con que entretenerse, seguridad policial, soluciones a los problemas de aparcamientos, y así un sinfín de cosas.

Con lo dicho hagamos una pequeña reflexión. ¿De verdad la gente es amnésica y no recuerda que hace cuatro, ocho y doce años les vinieron con el mismo cuento en periodo electoral y durante la legislatura no volvieron a pisar sus calles y barriadas? Entonces cuando un candidato y su gueto de oportunistas llegan en estas fechas tan señaladas a estos puntos (también llamados puntos PES) ¿por qué a la gente se le cae el culo al verlos y no le reprochan la dejadez que han sufrido durante el mandato de estos? Desde luego sería mejor mandar a los políticos a la mierda uno por uno y seguro que te quedas tan a gusto. Pero como decía aquel desalmado “con tabletas de turrón…” (Ahora se ha cambiado el turrón por el reparto de tartas, simbología inequívoca y subliminal de lo que estos harán cuando gobiernen).

Personalmente yo vivo en uno de los conocidos “barrios populares de Estepona” y desde hace un mes he visto candidatos tanto del gobierno actual como de la oposición, llegando con su séquito y repartiendo saludos a todo el que se mueva. Como todos los barrios hay un colectivo creado para representarlos (o al menos eso se piensa) y en lugar de recriminarles sus actuaciones por dejar en el abandono a su barrio, les ríen las gracias a los políticos de turno que vuelven a repetir promesas incumplidas. Ahí es donde quiero llegar con la borreguería de la gente.

La gran mayoría de políticos piensan que los votantes son fácilmente manipulables y con actuaciones como las que he comentado lo demuestran. El pueblo para demostrar que no es tan borrego responde con la abstención de su derecho al voto. Pero es aquí donde para mí se demuestra ser más borrego y tonto, porque la solución no es dejar de acudir a las urnas, si no analizar lo que hay y el currículum político que atesoran, siendo lamentable en la mayoría de los casos. Por eso mismo habría que apostar por el que se presente más inmaculado, aunque no diré para mi quienes son porque sale por eliminación.

Así que señores, demostremos que no somos un pueblo de borregos y que estamos capacitados de cambiar a los que “con 30 millones de € nos retiramos” y a los que quieren vender Estepona como dijo el señorito Crespo en Fitur a la televisión local “estamos aquí para vender Estepona”. Y es que a algunos el subconsciente le traiciona demasiado.